lunes, febrero 23, 2009

ATP DE BUENOS AIRES - FINAL
Tommy, una ópera con la raqueta

"Estoy feliz por haber tenido dos semanas como las últimas. El único pero de todo esto es que no hay tiempo para disfrutar. Uno se merece ir de fiesta con todo su equipo cuando pasa algo como esto. Lamentablemente ya me tengo que ir para el hotel, coger las maletas e irme para el aeropuerto para tomar el vuelo hacia Acapulco, donde tendré que jugar otra vez, todo apelotonado. Supongo que cuando vuelva a España tendré tiempo para festejar."

Así es muchas veces la vida del tenista, como la describió el catalán Tommy Robredo minutos después de consagrarse nuevo campeón de la Copa Telmex al vencer a Juan Mónaco por 7-5, 2-6 y 7-6 (7-5). El segundo título seguido, sumado al de la semana anterior en el Brasil Open y la semifinal alcanzada en Viña del Mar. Lloviznaba sobre el court central del Buenos Aires Lawn Tennis Club, como durante casi toda la tarde.

La ilusión del tandilense Juan Mónaco de lograr su primer título en esta nueva etapa con Luis Lobo como entrenador y después de una temporada signada por las lesiones y los malestares había terminado entre lágrimas que secó un toallón blanco, que debajo tenía el sudor de tantas corridas y el polvo de ladrillo de algunas caídas. Pico tiene una costumbre que no cambia por nada: jugando bien o mal, deja la vida en la cancha, aunque eso le cueste algún revolcón. Ayer no jugó todo lo bien que habría sido necesario en los momentos decisivos del encuentro. Y con un viejo zorro de las canchas lentas como Robredo, eso se paga. Ni las cábalas le surtieron efecto a Pico, que a estas alturas hasta debe de estar pensando que por algo pasó lo que pasó: hasta la final, había vencido a compatriotas; el único extranjero con el que se enfrentó fue el español, en la final. Y perdió.

Por eso, Mónaco miraba hacia cualquier lado cuando Robredo recorría la cancha con cara de asesino mojando con champagne a las promotoras, que corrían desesperadas. Luego llegó la reconciliación sobre la tarima de la premiación, donde no le daban los brazos para abarcar en el abrazo a todas las chicas posibles. Y tan contento estaba en ese momento rodeado de bellezas que cuando los flashes cesaron pidió, con cara de pícaro: "A ver, ¿puede ser una más, por favor?".

La gente se divirtió y aplaudió para reconocer la valía del vencedor. Y el muchacho que fue bautizado Tommy en homenaje a la ópera rock del grupo The Who agradeció: "La gente se portó de maravillas. Es lógico que hayan alentado a los argentinos, como a Mónaco, pero siempre mostraron respeto por los rivales. El argentino es un público que sabe de tenis, y eso se nota. Es muy lindo jugar en un clima así. La gente tiene sus cantitos como en el fútbol y nosotros, como extranjeros, también lo disfrutamos, nos reímos".

Amante de la "j?" de Buenos Aires, como dice en porteño, pero con tonada ibérica, Robredo lamentó no poder quedarse para pasar una merecida noche de festejo. Había hecho un trabajo de orfebre, con un gran esfuerzo físico, en un partido con limitada lucidez. Se llevó un primer set parejísimo, pero el envión que pudo haberle dado lo interrumpió la lluvia, que detuvo el partido por más de una hora y media.

Al regreso, Mónaco se mostró mucho mejor, sobre todo certero al reducir el margen de error en una final con muchas imprecisiones producto de una cancha y un clima inestables. A la vez, el español se convertía en un concierto de errores. En el tercer set, Pico estuvo 3-0 y 4-2 en ventaja, pero la ansiedad le jugó una mala pasada, no pudo sostener la diferencia y Robredo, paciente, llevó por primera vez la definición de la Copa Telmex a un tie break, que ganó no con poco susto.

Con el trofeo en las manos, el campeón trazó sus objetivos: "Estuve dos años entre los 10 mejores del mundo y el año pasado me salí. Cuando uno llega al grupo de los mejores no se da cuenta de lo que significa estar allí. Y cuando sale, se da cuenta de lo lindo que es. Uno tiene que decidir: o sigue igual o cambia. Yo cambié y vine a esta gira porque quiero volver a ser un top ten".

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy bueno el partido de pico una lastima que no lo aya ganado. casi me pongo a llorar al verlo llorar a él pobre. fuerza para pico!!!!