viernes, marzo 06, 2009

COPA DAVIS

Mónaco: el sueño del pibe

A los 24 años, Pico cumplirá con su gran ilusión: jugar por los puntos en una Copa Davis. Le peleó con todo a la lesión y será el singlista número uno. "Hay que estar unidos y dejar todo por el país", sentencia.

Si hay alguien que se esforzó al máximo por estar en esta serie de Copa Davis ante Holanda es Juan Mónaco. Una maldita periostitis en la pierna izquierda lo aqueja desde hace ya dos semanas y llegó a poner en duda su participación. Pero a base de un constante tratamiento y, sobre todo, de muchísimas ganas de jugar, el tandilense encontró su premio: será el singlista número uno de Argentina para la serie ante los europeos.

Cuando en el segundo turno de hoy salga al estadio Mary Terán de Weiss para enfrentar a Thiemo De Bakker, Pico cumplirá con uno de sus sueños: representar a Argentina en una serie de Copa Davis por los puntos. Es que en sus dos participaciones previas jugando por la Ensaladera, lo había hecho con la serie ya definida. Cuando enfrenta los grabadores no esconde esa pasión que le genera la Davis. "Tengo mi pensamiento sobre esta competencia y por eso estoy acá, más allá de la lesión. La ilusión y las ganas que tengo de jugar tapan un poco las heridas. Volver a formar parte de esto para mí es importante y lo valoro mucho", señala un ilusionado Mónaco. Y continúa con sus sensaciones.

-¿Qué significa para vos representar al país?
-Es algo muy importante. Acá en Argentina, teniendo el nivel que tenemos, se complica representar al equipo, ya que sólo son cuatro los que pueden participar cuando hay quizás ocho o nueve que están en condiciones de hacerlo. Así que es un honor tener esta posibilidad.

-¿Cómo te sentís realmente de la lesión?
-Cada día me fui recuperando un poco más. Vengo haciendo kinesiología desde el domingo casi sin parar hasta la una de la mañana. Me levanto a las 8 para tratarme la pierna y llegar mejor al partido. En la semana me sentí bien y respondí sin problemas. Así que creo que voy a llegar muy bien.

-¿Arriesgaste para jugar la Copa Davis?
-Sé que estoy haciendo un esfuerzo muy grande. Esperemos que salga todo bien y después pueda descansar un poco. Mi idea también es ir a Indian Wells la semana que viene, pero hay que ver cómo quedo después de esto.

-¿Sentís que empieza una nueva etapa?
-Seguro. Cambió el capitán y el cuerpo técnico, y también hay quizás un cambio en los jugadores. Este nuevo proceso hay que apoyarlo. Esto es Copa Davis, se representa a Argentina, y uno siempre tiene que dejar todo por el país.

-¿Es una especie de revancha para vos este momento, después de un 2008 bastante esquivo?
-No sé si tomarlo de esa manera. Es una nueva etapa, estoy jugando muy bien y recuperándome de algo que me pasó. Pero revancha no; esto arranca de cero.

-Para esta serie quedó un equipo nuevo, sin un líder definido. ¿Está presente el concepto de equipo?
-Sin dudas. Al no tener un referente importante, porque Del Potro y Nalbandian están afuera, será clave que seamos un conjunto, que nos apoyemos todos por igual y que tiremos todos para adelante.

Es muy grande la ilusión y el entusiasmo que la Copa Davis genera en este tandilense de 24 años. Es por eso que tomó su preparación con muchísima seriedad. Con el correr de las prácticas en Parque Roca, el pupilo de Luis Lobo fue exigiéndose más y más, dejando todo de sí por más que sólo se tratara de prácticas. Se lo vio muy motivado y de buen humor, pero sin perder la seriedad para el trabajo y la concentración. En el entrenamiento del miércoles jugó un partido frente a Chela que pareció una final. Eran asombrosas las ganas de uno y del otro, corriendo de lado a lado y matándose a palos.

Mónaco no se cansa de repetir que sus ganas de jugar son enormes. De hecho, en la conferencia de prensa del martes, llegó a decir que "salvo que me rompa una pierna voy a estar seguro". Una muestra del optimismo y del corazón que Pico puso para cumplir con uno de sus objetivos.

A Juan Mónaco le llegó la hora de demostrar que puede ser clave para las ilusiones de Argentina de luchar por la tan ansiada Ensaladera de Plata. Está claro que va a dejar todo por defender esos colores celeste y blanco que tanta pasión le generan.

LEANDRO FERNANDEZ (Clarín)

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